sábado, 11 de octubre de 2014

Mi bollito lindo

La semana pasada mi bollito lindo llegó a sus cuatro mesecitos. Es una niña preciosa, llama la atención allá donde vamos. La gente me para por la calle sin conocernos de nada sólo para verla! Y yo, claro, más ancha que larga. Está en el percentil 100 de peso y en el 97 de altura, así que os podéis imaginar hasta que punto destaca sobre otr@s niñ@s de su tiempo.

Aunque la gente me mira incrédula, llevamos 4 meses de lactancia materna exclusiva, de feliz lactancia a pesar de los baches en el camino. Y es que está taaan bonita mientras come... Y cuando me mira y me sonríe mientras la leche se le sale de su boquita de piñón yo me derrito. Desearía que esta época durara eternamente!! Nunca pensé que fuera a sentir esto tan profundo al dar de comer a mi pequeña, yo que siempre he sido tan práctica, que pensaba que los biberones vienen tan bien cuando necesitas un rato para tí. No se me pasa por la cabeza dejar a mi niña con nadie (ni abuel@s) y mucho menos darle un biberon, se me caería el mundo a los pies si llegara a cambiarme por una tetina!! Es algo tan visceral lo que siento... Instinto puro!

Pero no todo iba a ser tan bonito. Mi bollito cada vez es más y más cabezona. Desde que descubrió lo que era llorar no lo ha dejado. Es una niña que no se sabe entretener, ni sola ni acompañada. Empiezas un juego con ella y antes de los cinco minutos ya se ha cansado y te lo hace saber gritando, berreando. Por el día duerme regular tirando a mal y eso repercute en su carácter, se vuelve aún más protestona. Sus siestas son fugaces, no nos da un momento de tregua. Y mientras está despierta, pide atención constante o calle. Bendita calle!! Al menos tenemos esa vía de escape! Y yo que pensaba que cuando empezara cojer cosas se entretendría más... Al menos las noches son buenas, no del tirón, pero descansamos. Comer y dormir, salvo alguna excepción.

Por cierto, muchas gracias a Birgitte, de aventurasydesventurasdeunaprimeriza.blogspot.com (no consigo poner un enlace...) por su nominación, pero este terremoto de niña no me deja ni un minuto para contestar a tus preguntas y mucho menos para seguir y poder nominar a otros blogs...